Si eres amante de los colores brillantes, este frasco DIY te encantará. Es súper sencillo y quedará perfecto en cualquier parte de tu habitación o mesa de trabajo. Además de una buena idea para reciclar. Sólo necesitas tarros de vidrio con tapas, pintura, pegamento, purpurina y pincel. Puedes ponerle un color o varios para que haga contraste con el ambiente donde será colocado. Seguro te divertirás un montón haciéndolo, ¡y quedará fantástico!.
Vía kastyles
GuardarGuardar
.