Aún recuerdo cómo cuando era pequeña en el cole hacíamos esas manualidades imposibles para regalar a nuestros padres en este día tan especial. Y recuerdo la ilusión con la que hacíamos en clase ese regalo y la emoción de llevarlo a casa a escondidas para mantener el secreto hasta que llegara el día. Hoy día, en muchos coles, esto ha dejado de hacerse y ha dejado de celebrarse este día como se hacía cuando éramos pequeños…
Pero todavía hay quien quiere que el papá de la casa reciba en este día un bonito detalle. Y como no podía ser de otra manera, con un regalo especialmente hecho para él.
Así se puso en contacto conmigo Noeliahace unas semanas. Noelia quería saber si podría hacer alguna camiseta para regalar a su marido para el Día del Padre. Le enseñé el modelo que ya había hecho en otras ocasiones pensado especialmente para ellos. ¿Recordáis como eran? Aquí y aquí podéis refrescar a memoria ;-).
A Noelia le pareció una buena idea, pero me preguntó si se podría hacer una modificación al modelo original: sustituir las siluetas de las manos por huellas de pies.
Por supuesto, le dije que era posible. Estas son las ventajas de hacer las cosas a mano y personalizadas.
Como en las anteriores camisetas, esta también llevó su crucigrama con las palabras que ella misma decidió, todas referidas a su familia.
Para las huellas de los pies que debían acompañar al crucigrama, Noelia me dijo que debían representar al papi, la mami y dos niños, de 4 años y 18 meses respectivamente.
Con todos estos condicionantes, así es como resultó la camiseta para Noelia:
¿Os gusta cómo ha quedado? Espero que al papi le haya gustado este regalo tan detallista, y que luzca su camiseta única bien orgulloso de llevar a su familia en ella.
Besos y hasta la próxima entrada.
Fuente: este post proviene de Día Tras Día, donde puedes consultar el contenido original.
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