La colección era Vin du Jour, y la verdad es que no puede ser más bonito.
Quince días más tarde ya estaba metiendo mano a la telas, según podemos ver en este post.
Pero así ha permanecido en reposo hasta junio del año pasado que empecé a añadir otras telas y os lo enseñé aquí.
Estoy más que satisfecha con la combinación, sólo la mitad son las causantes de haber empezado este quilt y, francamente, las nuevas quedan perfectamente incorporadas.
Bueno, vamos a acercarnos un poco.
Es enorme, ya lo he estrenado y me encanta.
Para la trasera, me trajo mi amiga Concha una colcha india, al final tuve que añadir un poquito, pero no queda mal, esa es una de las grandezas del patchwork.
Estoy encantadísima con mi nuevo quilt.
Que suerte tenemos, podemos estrenar quilt muy a menudo, casi cuando queramos.
El año pasado acabé 6 quilts, este año espero tener, más o menos, la misma cosecha.
O más!!!
Y sigo coso que te coso...