Y es que hemos decidido colaborar en el proyecto del blog. Yo seguiré haciéndolo los jueves y ella, de vez en cuando, contribuirá con algunas de sus creaciones. La verdad, no sé si he hecho bien porque ella tiene más maña y más tiempo que yo, jeje!!!
Pues lo dicho, os presento a Susana, mi madre, de la que he heredado este interés por las manualidades. Llevo toda la vida viéndola hacer cachivaches e inventos, siempre liada con las pinturas, el, pegamento, el ganchillo... Vamos, que no le tiene miedo a nada.
Y se estrena con algo muy de la época, la Navidad, y con un duendecito muy simpático al más puro estilo reciclaje.
MATERIALES
- maceta de plástico
- bola de porexpán
- lana, ganchillo y relleno
- fieltro
- cordón
- rotulador permanente
- pintura acrílica
- pistola de silicona
El cuerpo del duende es una maceta de plástico que ha pintado con una base de acrílico blanco seguido de dos de azul. Los topitos, en blanco, los ha hecho con los fieltros del tabaco que yo le di (luego me dice que no fume ;-)
Las piernas y los zapatos, para mí lo que más trabajo tiene teniendo en cuenta que el ganchillo se me da fatal, los ha hecho con la técnica de amigurumi. Y ha desvestido un santo para vestir otro, pues ha destripado un cojín para rellenarlas.
La cabeza es una bola de porexpán pintada con acrílico rosa claro. Ojos y boca están pintados con rotulador permanente. ¿Y qué duende no tiene un bonito gorro? Tanto el gorro como los guantes están hechos con fieltro y adornados con cordón tejido a ganchillo.
Para pegarlo todo ha utilizado silicona caliente. ¿Que haríamos sin ella? Estoy por escribirle una oda...
Y el resultado no podrí ser mejor, ¿no creéis? Aquí os dejo al duende "posando" para la ocasión, su gran entrada en sociedad.
Como presentación no está nada mal lo que nos ha traído hoy mi madre y esperar que viene cargada. Al final será ella la que publique y yo la que colabore, y si no, al tiempo.
Compartamos y disfrutemos juntos.