¡Mirad el regalito que una amiga me ha traído de Nueva York! Los recortables vuelven a estar de moda, como tantas cosas lindas que conocieron nuestras madres, y que nos pirramos por enseñar a las princesitas.
Estoy deseando que mi vecinita Inés llegue del colegio para enseñárselo. Y aunque mucho me temo que tendré que regalarle todo el vestuario (ella dice "prestar", pero es lo mismo), seguro que me compensa por el rato que pasaremos juntas esta tarde, planeando fiestas de película y viajes apasionantes "con muchas maletas de ropa"
¡Estoy pensando que podríamos hacer un móvil colgante, con todas las prendas bailando alrededor! O un marcapáginas, ya que la cartulina es muy consistente. ¿Qué os parece?
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