¿Qué es el origami o papiroflexia?
Origami es el arte de plegar el papel para obtener figuras decorativas variadas. La palabra origami viene del japonés antiguo, y quiere decir Ori plegado y kami papel. Aunque el nombre de este arte en español es, Papiroflexia, en la mayor parte del mundo se utiliza el término origami.
Los temas que pueden ser trabajados en el origami, pueden llegar a ser infinitos, teniendo en cuenta que la limitación más importante de este arte, es plegar la hoja sin cortarla. Actualmente existe una gran diversidad de figuras que van desde muy sencillas a extremadamente complicadas, inclusive llegando a construirse robots con figuras de papel.
El número de pliegues en un modelo puede variar de sólo unos pocos a literalmente cientos. El detalle en pliegues complejos puede ser asombroso, para los artistas de la era moderna han llevado el origami a alturas sin precedentes de realismo y complejidad. Mientras que un pájaro simple puede tomar menos de un minuto para hacer, no es raro que un un insecto complicado
Pueda llegar a tomar dos a tres horas.
Origen del origami
La mayoría de avances en la papiroflexia han venido en los últimos cincuenta años, pero es un arte antiguo; sus orígenes se remontan a la invención del papel mismo. El arte de la fabricación de papel se desarrolló en China, y desde allí viajó al resto del mundo. Los monjes budistas llevaban papel para Japón en el siglo VI A.C., y los primeros pliegues de origami japonés datan de ese período.
Al principio, el papel era una mercancía escasa, y su el uso se limitaba a ocasiones ceremoniales. Los pliegues desarrollados para estas ocasiones eran simples. Representaciones estilizadas de animales, personas disfrazadas o diseños ceremoniales.
Los diseños fueron transmitidos a través de las generaciones de madre a hija. Había pocos registros escritos de diseños del origami original, y así los únicos pliegues que perduraron fueron simples. Sin embargo, muchos de los origami tradicionales tienen una belleza duradera, y su simplicidad es atractiva.
Era moderna de las figuras de papiroflexia
A dos hombres se les atribuye haber introducido el origami en la era moderna, y con su contribución paso a ser de una simple novedad, a una forma de arte con muchas variaciones, con un aumento espectacular de la gama de pliegues y posibilidades. Estos dos hombres fueron Miguel de Unamuno de España y Akira Yoshizawa de Japón.
Miguel de Unamuno (1864 – 1936)
Unamuno fue un escritor español que introdujo el arte de figuras de papel en España y América del sur en la década de 1930. Fue parte de un movimiento de plegado de papel (papiroflexia), tanto en España y Argentina, pero este movimiento no se extendió al resto del mundo. Se mantuvo más o menos a esos países.
Otro de los aspectos por los que se destacó fue por escribir, además de multitud de obras literarias de gran relevancia, una especie de tratado acerca de la ‘cocotología‘; término creado por el propio Unamuno (lingüista, entre muchas otras cosas) para designar a la papiroflexia, que deriva de ‘cocotte’ que significa algo así como ‘gallina’ o ‘pajarita’ en francés. Además, Miguel de Unamuno publicó varios libros de plegado, entre ellos el ensayo “Amor y Pedagogía”, donde habla de la papiroflexia en el apéndice.
Así pues, Miguel de Unamuno además de su consecuencia en la península ibérica, tuvo también una enorme influencia en América del Sur. Es más, podríamos decir que es el padre de la papiroflexia hispanoamericana pues, al igual que en España, la papiroflexia tenía hasta entonces muy poca relevancia. Sin embargo, la papiroflexia como tal, tuvo mayor aceptación en América del Sur donde hoy día tiene muchos seguidores y han surgido grandes papirofléxicos como por ejemplo los argentinos Vicente Solórzano Sagredo y Ligia Montoya quienes practicaron la papiroflexia, dándole gran importancia a este arte de plegados y figuras inimaginables, entre otros.
Akira Yoshizawa (1911 – 2005)
Es con Akira que el origami fue cambiado para siempre y llevado a nuevas alturas y no sólo como una novedad, sino como un arte creativo. Pasó sus primeros años en la pobreza, pero a la edad de 40 las cosas cambiaron para él y para su relación con la papiroflexia. Se diseñó una serie de modelos de Papiroflexia del zodiaco para una revista llamada Asahi imagen Gráfico que fue publicado en 1951.
Fue esta publicación que lo convirtió en una sensación de noche que conducen a un mayor número de publicaciones y trabajo. En 1954 se publicó el primero de sus muchos libros de papiroflexia llamado Atarashi Origami Geijutsu (Arte Nuevo de Origami). Y fundó el Centro Internacional de Origami en Tokio en 1954. Otro de sus libros que ahora se considera un clásico es Origami Dokuhan que fue publicado en 1957.
También creó la técnica denominada de plegado en húmedo donde el papel se humedece para que pueda ser doblado y curvado de nuevas maneras. Una de sus obras más famosas “La cara del gorila” utiliza esta técnica.
En la década de 1960 Yoshizawa se embarcó en una gira mundial de 30 países para promover el arte y el oficio de Origami y para actuar como un embajador cultural de Japón. Por sus logros en el arte del emperador de Japón le otorgó la Orden del Sol Naciente
Algunos de sus libros más famosos:
Atarashi Origami Geijutsu (New Art Origami)
Sosaku Origami – (Creative Origami)
Tanoshi Origami – (alegre Origami)
Origami Museo I: Animales (v. 1)
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