Tenía en casa una vieja garrafa de vino que estaba sin utilizar desde hacia tiempo. Entonces decidí quitarle el plástico que protege el cristal y la limpié a conciencia. Después elegí este diseño, lo perfilé y rellené dando el volumen adecuado a cada elemento y por último lo decoré con laca de bombillas. Creo que el cambio a merecido la pena, ha pasado de ser una garrafa abandonada en el sótano a ser una garrafa decorada en un rincón de mi salón.
GARRAFA DECORADA CON PASTA DE CRISTAL
Tenía en casa una vieja garrafa de vino que estaba sin utilizar desde hacia tiempo. Entonces decidí quitarle el plástico que protege el cristal y la limpié a conciencia. Después elegí este diseño, lo perfilé y rellené dando el volumen adecuado a cada elemento y por último lo decoré con laca de bombillas. Creo que el cambio a merecido la pena, ha pasado de ser una garrafa abandonada en el sótano a ser una garrafa decorada en un rincón de mi salón.