El cumpleaños de Alex, mi sobrino el mayor.
Su cumpleaños fue en Junio, pero hasta ahora no se lo he hecho.
Cuando le dije a Jerusalem la idea, me la quitó de la cabeza diciendo que no le iba a gustar. Ahora, cuando lo ha visto hecho le ha encantado.
Para salir de dudas, se lo pregunté a Elena, su hermana, y me dijo que si.
La verdad es que lo he hecho, con cierto respeto, pero me ha gustado mucho el resultado final.
La manta es negra de peluche, más amorosa imposible.
La verdad es que tenía que haberla entregado con instrucciones de montaje, porque no sabe guardarla cualquiera.
Dicen que algunos la usan metiendo los pies en el cojin, se me ocurre, y si le metiésemos un cojín de semillas? Calentito, calentito.
He querido ponerle unas camisas del abuelo en el cojín porque Alex tenía una relación especial con mi padre que siempre le defendía, lo de menos es que el niño tuviera o no razón.
Como tía puedo decir y digo que Alex es muy tierno.
Y sigo coso que te coso...