A la hora de montar una casa de muñecas, hay quienes prefieren realizar un proyecto personal, diseñando la casa y construyéndola pieza a pieza, para después empapelarla, ponerle la iluminación, y a continuación empezar con los muebles. Pero el ochenta por ciento de las aficionadas optan por comprar un kit prefabricado, que viene ya completo y desmontado como un mueble de Ikea, para de inmediato comenzar a decorar su casa en miniatura.
El interior de una casa en kit. Como podemos apreciar, los elementos esenciales son la escalera y la fachada, que gracias a unas bisagras se abre como un aparador. El material de suelo, paredes y tabiques es el tablero DM.
La cocina es la habitación estelar de las casas de muñecas. A menudo es la que primero se monta, y la más llena de pormenores regocijantes.
Las casas compradas en kit vienen ya pintadas, con todas sus piezas. El montaje es sencillo y cualquiera puede realizarlo, sin tener conocimientos de bricolaje.
Las casas de muñecas y todos sus artículos se fabrican en una escala universal, 1:12, de esa forma no hay que limitarse a un solo proveedor. Aquí vemos el mobiliario de un cuarto infantil.
Para quienes opten por fabricarse una casa a su medida, conforme a su propio diseño, el mercado ofrece la gama completa de elementos constructivos: puertas, ventanas, escaleras, balaustradas… De esa forma se facilita mucho la tarea.
El mobiliario y el menaje en las casas de muñecas sigue diseños tradicionales, como podemos apreciar en estos juegos de vasijas y cacerolas.
Estos muebles de salón son de una prestigiosa marca francesa. Su fabricación es completamente artesanal, y están pintados a mano.
Los fabricantes ofrecen toda clase de comestibles, bebidas, conservas, hortalizas y pasteles para llenar la despensa y los aparadores de la diminuta cocina.
Un delicioso juego para la cocina. Las puertas y cajones de los pequeños muebles pueden abrirse, para así guardar cosas en el interior.
Un sinfín de encantadores detalles para ambientar el dormitorio infantil. Algunos de los adornos son apenas mayores que un guisante.
Cuando los felices moradores quieran sentarse en el jardín encontrarán un completo mobiliario, fabricado en fino alambre que simula perfectamente la caña y el mimbre.
El suelo y las paredes de la cocina, igual que el resto de la casa, pueden adornarse con papeles autoadhesivos, de los que hay una variada oferta.
Los minúsculos adornos increíblemente detallados son, con frecuencia, lo más regocijante de la habitación. Esta pecera es un buen ejemplo.
Para vestir el jardín contamos con todo tipo de enseres reproducidos a la escala adecuada, desde las regaderas y aperos hasta la caseta para el guardián de la casa.
Todos los elementos necesarios para elaborar un suculento pastel de manzanas. Observemos el gracioso detalle de las frutas mordidas en la fuente.
El rincón de la costura dispone de cualquier utensilio, maniquí, tela o mueble que se requiera.
Finalmente, conviene tener en cuenta que hay casas de varios tamaños, y las más pequeñas son también un magnífico regalo que hará las delicias de mamá.
Los elementos para el cuarto de baño vienen también pintados en el elegante estilo victoriano.
Para amueblar el salón tenemos una gran variedad de tresillos, sillones, butacas, jaulas, consolas, aparadores, cojines y vitrinas.
Un variopinto elenco de simpáticos personajes, con vestidos de época, nos permitirá crear la familia que habitará en nuestra casa.