!Este recurso de tejer con bolsas de plástico me pone muy feliz, porque sé que puede evitar al medio ambiente toneladas de perniciosos vertidos anuales! Basta plegar las bolsas y cortarlas en tiras para obtener una larga cinta de plástico, que se trenza con toda facilidad hasta convertirla en un filamento, perfectamente apto para tejer con las agujas clásicas de crochet. Se comprende el éxito radiante de esta manualidad, que pone en feliz sintonía la afición a las prendas de punto junto con el compromiso ecológico.
¡Quién iba a decirlo! Las dichosas bolsas de plástico pueden convertirse en servilleteros, fundas, muñequitas, pamelas y otras mil cosas lindas. La varita mágica para hacer este embrujo se vende en las mercerías y se llama aguja de crochet. La técnica del ganchillo que apasionaba a nuestras abuelas sirve ahora para tejer divertidas piezas juveniles, ¡y sin gastar un céntimo en hilos! Un buen día, alguien cayó en la cuenta de que cortando bolsas en tiras podía hacer punto con ellas, como si fuera un ovillo de lana. Y el invento recibió una acogida clamorosa. Te explicamos el procedimiento para tejer con bolsas de plástico y que tú también puedas recrearte con la afición de moda, ¡es muy sencillo!
Nuestra lectora Suelix nos explica la sencilla preparación de las bolsas para convertirlas en ovillos de tejer. Empezamos cortando el fondo y las asas.
A continuación, enrollamos la bolsa con varios dobleces, y cortamos tiras de un dedo de anchura. Ya sólo falta hacer el ovillo y ponerse a tejer. Seguramente habrás notado que falta un detalle importante: cómo se convierten los trozos de plástico en un solo hilo continuo. Aquí hay diversos métodos. Egabrense, otra de las expertas, aconseja coger la siguiente pieza antes de acabar la anterior, y realizar unos puntos con las dos tiras unidas. Después, ya terminada la prenda, daremos unas puntadas con hilo en las uniones, para más seguridad.
Suelix prefiere encadenar las tiras como nos explica en la foto. Es un método muy habitual, y da buenos resultados.
Ya sólo falta hacer el ovillo y tejer. Suelix nos cuenta que al principio escogía bolsas gruesas, lo que dificultaba el trabajo por la rigidez del hilo. Entonces decidió usar bolsas finas. Aquí vemos el fantástico resultado de su labor.
¡Veamos diversas tareas con bolsas de plástico! Mamut regaló a Alp1 este bonito servilletero, en el que apreciamos uno de los atractivos de la tarea: la mezcla de colores, que la tejedora prepara seleccionando tiras de diversas zonas de la bolsa.
La suegra de Amantisima es aficionada desde hace mucho tiempo a esta labor. Y nuestra amiga, encantada, es la feliz destinataria de muchos bonitos regalos, como el conjunto que vemos en la foto.
Spliego es la especialista en muñequitas, como vemos. Su método de preparar las bolsas es diferente al de Suelix: después de quitar las asas y el fondo, nos queda un tubo, abierto por arriba y por abajo. "Entonces vas doblando, de manera que las partes cortadas queden en los extremos; al doblarla dejas como dos centímetros por la parte superior, y vas cortando la tira siempre respetando la parte superior de dos centímetros, que se deja sin cortar. Al final todo estará cortado menos la parte superior, y ahí es cuando empiezas a sacar la primera tira, pero al bies y así sucesivamente, y verás que queda todo convertido en una sola cinta, lista para hacer un ovillo".