Comenzamos quitando la parte trasera y el cristal y nos quedamos sólo con el marco. Para este trabajo he utilizado pintura a la tiza. He combinado varios tonos en este caso, porque es un marco múltiple y quería algo más alegre.
Nos harán falta por lo menos un par de capas. Una vez seca la pintura, barnizamos con barniz al agua (mate, satinado o brillante) o le damos una mano de cera, dejamos secar y sacamos brillo con un paño de algodón.
Cuando ya lo tenemos terminado es hora de elegir la temática de las fotografías que vamos a utilizar, familia, un viaje, fotos antiguas o en blanco y negro...
Yo elegí la temática familia y en el marco central elegí poner una frase que iba muy bien con el tema. Para ello utilicé una cartulina negra y escribí la frase con tinta dorada.
A mi me encanta el resultado ¿A vosotros? Para mi el marco es mucho más personal y gana en sensación de calidad y personalidad. Por supuesto, como siempre, las opciones son ilimitadas, todo depende de vuestra creatividad y de la decoración de vuestra casa.
También es una estupenda idea para regalar, yo le hice uno a mis padres con fotos de sus nietos y les encantó.
Aprovechando que estaba de racha con esto de los marcos, pinté uno de esos de las fotos del año del bebé, que no me gustaba el tono plata típico de estos marcos. Y no quedó mal la verdad.
Este es el ANTES
Este es el DESPUÉS
Como siempre, os invito a sumergiros en vuestra creatividad para decorar vuestros hogares o para simplemente pasar un rato relajado sin pensar en otras cosas.
Un besote!!