un diseño un poco diferente, me parece muy coqueto,
con un dulce estilo shabby chic.
Los colores lilas y beige,
son los que tengo en mi habitación desde hace unos años,
me parecen unos tonos muy suaves y relajantes.
El cojín tan sólo lleva
un corazón de puntas desiguales inspiración country
aplicado con puntada escondida y rematado con unos bordaditos.
Y una inicial, me la dio mi madre hace muchísimos años
y quería utilizarla en algún trabajo,
la he aplicado y le he bordado algunas detallitos.
En el borde una puntillita.
El sitio donde lo he puesto
es otra cosa que dejé a medias hace unos meses,
un sillón que empecé a restaurar después del verano
y lo tuve que dejar cuando me hice daño en la mano y ahí se quedó.
La verdad es que a veces me meto en cada jaleo.
Quería renovarlo, porque aunque era precioso, estaba bastante mal
y era muy serio, en madera y con una tela ocre.
Pues nada, manos a la obra,
compre una pintura de estas a la tiza
chalk paint que están tan de moda
y hay que reconocer que es fácil de utilizar,
se pinta directamente sobre cualquier superficie.
Luego la decapé lijando los bordes.
El trabajo más laborioso a sido tapizarla,
aunque ya lo hice hace tiempo con la silla que tengo en el taller,
esta me ha costado bastante más.
Además de colocar muelles, cinchas, poner el relleno...
como he elegido una tela con cuadritos vichy,
que era la que quería desde que vi una monísima en Pinterest
Pues eso, que los cuadritos me han complicado
un poco más de lo previsto,
ya que son bastante chivatos
y se nota enseguida si te despistas y no vas recto.
Pero bueno ha merecido la pena,
me encanta como ha quedado.
Disfrutar de la Semana Santa!!!
Espero que os haya gustado.
Gracias por acompañarme
y por vuestros cariñosos comentarios
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