Ésta no tiene gatos, pero sí partituras. Además tiene un color crema de fondo precioso y súper combinable.
Y ahora que el final del curso está a la vista... aparcaré la mochila y necesitaré un bolso más pequeño.
Para llevar lo justo; las llaves, el móvil, las gafas de sol, la agenda y poco más. Correas ajustables y amplias de algodón para que los hombros no sufran en veranito...
Y el monedero detrás, en un bolsillo menos accesible, para mayor seguridad!
El cierre de velcro, para que la solapa no se mueva, y con las tiras de velcro perpendiculares, para que ajuste bien lleves el bolso medio vacío o a reventar.
Y bien acolchadito, que tenga cuerpo y mantenga su forma, incluso vacío.
Patrón propio, ¿te gusta? Tras llevarlo unos días ya le han salido dos novios, así que llevo cosidos tres casi idénticos!!! Vamos a Rumsear!
Fuente: este post proviene de Kiwa Kawaii, donde puedes consultar el contenido original.
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