Con esta cojín con cara de payaso quiero devolverle, cuando se lo lleve, un poquito de la alegría que él me da a mí cuando baja del autobús para venir al cole.
Quizá no esté perfecto, pero he hecho este cojín con cara de payaso para este buenazo al que le encanta tocarnos el pelo, los botones y todo lo que le permitamos. Es un explorador nato con un espíritu muy tenaz. Se merece esto y más....
El paso a paso ha sido el siguiente: escogí una imagen, la calqué , la pinté con pintura de tela y, en tela aparte pinté la boca, hice la naríz, el gorro, las orejas y la lazada.
Los mofletes, la naríz y el gorro los rellené de guata , que me había sobrado de otra labor,de la que se utiliza para forrar los edredones...
El pelo es lana que fuí cosiendo y que fijé posteriormente con cola vinílica para que no se me deshiciese.
Las pupilas son dos botones azules oscuros.
La estrella del sombrero está hecha con estrellas recortadas de la tela amarilla a las que les apliqué cola vinílica para que no se me deshilachasen y esto me permitió recortarlas. En el centro un botón verde.
Las orejas están pintadas por debajo pero vueltas a hacer en tela aparte y también pintadas. Después las he cosido para simular que son de verdad y que se pueden tocar.
Por el frente y parte posterior he puestto el nombre del niño con la técnica del estarcido.
Y éste es el resultado final con el relleo incluído.
Para tí PEDRO.