Mi idea era hacer una maceta baja y ancha para poder colocar varias plantas pequeñas de diferentes tipos, y crear así un jardín mini. Después de buscar y rebuscar por casa, encontré una bandeja de marisco que tenía guardada desde hace tiempo (bien lavadita, eso sí). Así que, los materiales a utilizar para este tutorial son:
- bandeja de madera
- pintura de dos colores
- líquido para craquelar
- pincel
- tierra
- suculentas de diferentes tipos
- film transparente
El proceso es exactamente igual al que seguí para restaurar la mesilla que os enseñaba en este post. Primero di una mano de pintura gris oscuro y dejé secar. Después apliqué el craquelador, paso del que hoy sí que tengo foto! Como veis, queda un efecto mojado similar al que deja una bayeta mojada cuando la pasas por una superficie. A continuación, apliqué pintura color malva y cuando secó, di una mano de cera para sellar.
Al tratarse de una bandeja de madera y, por tanto, tener una superficie porosa, se me ocurrió cubrir la base con film transparente, antes de echar la tierra. De este modo evitaremos que el agua de los riegos, pueda traspasar la base y mojar la mesa donde la coloquemos.
Por último, coloqué las plantitas en la posición que más me gustaba, rellené los espacios vacíos con abono, y regué para fijarla. Me ha gustado tanto el resultado, que seguramente haga alguna incorporación más en los huecos que han quedado libres de la bandeja.
¿Qué os parece el resultado? ¿Os gustan las suculentas?
Un besazo!!
Fuente: este post proviene de Medias y tintas, donde puedes consultar el contenido original.
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