Seguro que todos tenemos en el armario cosas que no utilizamos pero nos resistimos a tirar. Esto me pasa a mí con estas sandalias. Tienen un montón de años y están pasadas de moda, pero son de buena calidad y comodísimas !!!
Antes de irme de vacaciones pensé que ya era hora de darles una nueva oportunidad.
Cuando las compré estaban de moda (aunque ahora parezca imposible) y las usé mucho. Por eso la piel está sucia y desgastada.
El primer paso fue ir al zapatero y comprar un tinte especial para zapatos de color negro. El proceso es muy simple y seguro que todo el mundo lo ha hecho alguna vez. Con un pincel, que ya viene con el tinte, pintamos las sandalias y luego con una esponja, también incluida, lo repasamos para que no queden pinceladas.
Qué cambio !!!, sólo teñidas ya tenían ya parecían nuevas y tenían otro estilo, pero aún me parecían un poco aburridas y "monásticas".
Investigué un poco y descubrí unos rotuladores especiales para pintar neumáticos. De hecho, son unos rotuladores con base de aceite que pintan sobre cualquier superficie sin borrarse. Los hay de muchos colores y tienen un precio aproximado de 2-3 € cada uno. Yo compré en Ebay un pack de 6 colores (los que veis en la foto). Después de unas cuantas pruebas opté por el color verde.
Con cinta de pintor tapé todo alrededor de las sandalias y fui pintando el borde de la suela con el rotulador. Como la suela tiene diferentes relieves opté por pintar sólo la zona lisa.
Y este es el resultado, una nueva vida para mis sandalias. Yo creo que han ganado mucho, ¿¿no os parece??
Como ya he dicho, son muy cómodas y este verano las he aprovechado de nuevo. El resultado del tinte ha sido muy bueno, no se ha desgastado nada. En cuanto al rotulador, en la punta ha saltado un poco y en algunos lugares ha quedado "craquelado", pero nada que no se arregle retocandolas.