Los antiguos decían que el invierno no se lo comió un lobo, o lo que es lo mismo, que por mucho que se haga esperar tarde o temprano acabará llegando. El problema es que se le ha echado el tiempo encima (nunca mejor dicho) y ya hay voces agoreras que predicen una primavera pasada por lluvia, frío, viento y nieve.
Y va a ser este año, el mismo en que iba a seguir con mi huerto urbano (aquí) y en el que incluso me había construido un semillero DIY reciclando una huevera de cartón.
Ahora mi esperanza es que cuando los brotes asomen fuera de la tierra no les entren ganas de volverse por donde han venido, viendo cómo anda (o dicen que andará) el patio.
Así que por si acaso, voy a dejarlo todo muy bonito y acogedor a su alrededor para que no les falten razones para quedarse, empezando por los marcadores para identificar cada planta:
La clave para que hayan quedado así de perfectas la tiene Handbox y su último Desafío Craftlover, en colaboración con la web de etiquetas personalizadas Stick&Ready.
Yo era de las que marcaba la ropa con una de esas tiras adhesivas que escribes el nombre y luego la pegas pasándole la plancha por encima, y el resto de objetos escribiéndolo en un papel y pegándoselo con celo. Qué antigua y qué pena no haberlas conocido cuando empezó la escolarización de #laniña, la de trabajo que me habrían ahorrado.
Por eso mismo escogí el pack Etiquetas Escuela. En él puedes personalizarlo absolutamente todo: modelos, colores, iconos, texto y fuentes. Hay diferentes tamaños y formas, y me pareció súper original que tengan incluso para los zapatos, con una huella para cada pie:
Lo mejor de todo es que una vez que las recibes en tu casa es tan sencillo como despegarlas y ponerlas donde quieras, sin plancha ni nada. Las pones y 24 horas después ya puedes usar la prenda o el objeto hasta la saciedad, porque aguantan el paso por el microondas, la lavadora, el lavavajillas y la nevera:
Total que he marcado todas las cosas de #laniña con la esperanza de no pisar el cuarto de objetos perdidos del colegio en lo que queda de curso.
Y como me sobraron estas tres etiquetas y me gustan tanto con esos colores y el corazón, se me ocurrió hacer los marcadores para las plantas.
Para ello solamente tuve que escribir los nombres con rotulador permanente (los escribí encima del de #laniña, y como éste es imposible borrarlo, lo he quitado con el ordenador para que te hagas una idea de cómo quedaría en la realidad, sin nada debajo), pegar la etiqueta sobre un trozo de cartón y sujetarla con un palillo:
¿Qué te parece cómo han quedado? A mí me encantan, ahora sólo queda que las plantas piensen lo mismo y salgan rápido para verlas.
Si tú también quieres probar estas etiquetas personalizadas, ahora tienes la oportunidad de conseguirlas con 5 euros de descuento.
Para ello, una vez que hayas escogido y personalizado tus etiquetas y las hayas añadido al carrito de la compra, introduce el código PICAPECOSA5 en el campo "Código de descuento" y automáticamente te aplicará la rebaja.
Ya verás qué vicio marcando y etiquetando. ¡Pasa un feliz día!
* Post patrocinado por etiquetas personalizadas Stick&Ready.
Fuente: este post proviene de Pica Pecosa, donde puedes consultar el contenido original.
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