Mar ha sido una de esas personas que me ha transmitido con entusiasmo su idea, sin prisas, con claridad, algunas dudas resueltas y un agradecimiento correspondido.
A ella y su hija le entusiasman las muñequitas Gorjuss y he apurado la tela que me quedaba en un monedero de boquilla, una carterita y un neceser de camuflaje con cremallera.
Hacía tiempo que no colocaba una boquilla, y lo cogí con ganas.
El neceser para compresas y tampones lo prefirió con cremallera y se lo hice una pizquita más grande, para que entraran bien las compresas sin tropezar con la cremallera.
Y por último la carterita. Nunca había hecho una. Y no por falta de ganas, pero como de momento no me la había pedido nadie, dedicaba ese tiempo a otras de las muchas cosas que despiertan mi interés.
Por la parte delantera ya la habéis visto en la primera foto, aquí la podéis ver por el otro lado.
Y ahora por dentro: tarjetero, bolsillo lateral, billetera y monedero con cremallera.
Y para el cierre, un snap a juego.
Antes de hacerle a Mar la suya, practiqué con otra carterita que me he quedado yo. Quería ir segura, pues me quedaba la tela justa. Y preferí no arriesgar. ¿Adivináis qué tela elegí?
Y por último os quiero enseñar un nuevo reto que me propuso Mar para su hijo de 9 años, discreto y poco amante de los estampados o colores detonantes. Su idea fue una pequeña riñonera y mi propuesta: loneta azul, discreta y sufrida.
Mi firma en esta ocasión por dentro, que no destacase en la discreción que pretendíamos.
Y la cintura ajustable.
Si tú también eres una persona entusiasta, espero tu gran idea a la que intentaré darle forma del mejor modo posible y con la misma ilusión. En mi próxima entrada os enseño un pequeño trabajo para otra persona encantadora, su peculiaridad te la cuento entonces.
Gracias por vuestra compañía.