Con esta manualidad podemos reciclar también restos de puntillas, cintas, hilos… Buscando en mi baúl de los tesoros, me he encontrado con esto:
Unos cuantos restos de cintas navideñas que habían quedado de otras manualidades (la medida 25-30 cm dependiendo del contorno del vaso), un poco de encaje de algodón de color crudo, unas cuantas cuentas doradas y restos de hilos también dorados y, por supuesto, el vaso…
Necesitaremos también una aguja de bordar que permita el paso del hilo pero que al mismo tiempo pueda pasar por el agujero de las cuentas, una aguja de coser normal, una hebra de hilo de coser y un poco de silicona fría, más sencillo imposible, seguro que vosotr@s tenéis estos materiales en casa u otros semejantes.
Y ahora, los 5 sencillos pasos:
1. Con el hilo de coser pasar una bastilla (si no recuerdas cómo, mira aquí) por el borde recto del encaje (de encaje vamos a necesitar unos 10 cm más que el contorno del vaso para que quede con un poco de vuelo) para poder fruncirlo, pero lo dejaremos abierto hasta más adelante.
2. Forraremos la parte inferior del vaso con una de las cintas, en mi caso he elegido una cinta de arpillera que lleva entretejidos algunos hilos de lamé. Al forrar procuraremos que quede bien ajustada a las paredes del vaso y la sujetaremos con un poco de silicona, montando un poco los extremos.
3. Colocaremos el encaje con el frunce alrededor del vaso, por encima del borde de la cinta, y ajustaremos la medida al contorno, cuando quede bien la medida, remataremos el hilo y lo cortaremos. Distribuiremos el frunce para que quede parejo todo alrededor.
4. Forraremos ahora la parte superior del vaso que queda libre con otro trozo de cinta, en nuestro caso una cinta roja de cuadros tipo escocés que también lleva entretejidos algunos hilos de lamé (queremos que nuestro portavelas quede de un estilo rústico pero al mismo tiempo chic) y lo mantendremos en el sitio con silicona.
5. Enhebraremos la aguja con el hilo dorado y esconderemos el nudo por debajo del encaje, sobre la cinta que hemos colocado en primer lugar:
Insertaremos una cuenta y saltaremos un espacio para clavar la aguja de nuevo en la cinta de arpillera bajo el encaje, de manera que el hilo quede formando una onda con la cuenta en el centro, yo me he ido guiando por los cuadros de la cinta de arriba para calcular la distancia y me han entrado 7 cuentas, el resultado es este:
Me ha gustado tanto que he hecho otro portavelas con un vaso de los de vino y así han quedado los dos junto al Papa Noel del otro día:
¿No me diréis que no ha sido una manualidad fácil de verdad? Y además sin gastar un euro si la hacemos reciclando lo que tenemos en casa. Como suelo deciros, lo que os muestro es solo un ejemplo que os puede servir de inspiración y después podéis reinterpretarlo según los materiales de los que dispongáis, seguro que el resultado que obtendréis será estupendo, tanto que si me lo enviáis, me encantará colgarlo en Facebook y en Twitter, ¿os animáis?
Pues esto es todo… si os ha gustado la entrada, por favor, compartidla o dadme un me gusta y, para cualquier aclaración, enviadme un mensajito. Nos vemos el próximo día :-)
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