Muchas personas suelen pintar por la noche, pero a menudo se encuentran con bombillas que dan unos tonos amarillentos o con tubos fluorescentes que dan tonos más azulados. Para evitar este problema debemos utilizar bombillas que nos proporcionen una luz que sea lo más parecida posible a la luz natural.
En la imagen de cabecera se puede ver un ejemplo de un tubo fluorescente que sirve para pintar por la noche. Es el PHILIPS TL-D 90 Graphica Pro 36W/950 SLV.
Vamos a analizar brevemente los números del tubo:
- Los 18w son los watios y están relacionados con el tamaño del tubo fluorescente (aunque esto no nos indica ninguna calidad de la luz).
Los importante es lo que significa ese 950:
- El 9 indica la calidad de la luz. Un 6-7 sería una calidad media y un 8-9 una calidad alta.
- El siguiente número sería el 50. Hay que añadirle dos ceros y obtendremos la temperatura de la luz. 50= 5000K (aproximación). Aunque en realidad estos tubos tienen 5300K
Esta gama cuenta con un Indice de Rendimiento Cromático del 98% y una Temperatura de Color de 5.300 Grados Kelvin, utilizándose actualmente en empresas dedicadas a las Artes Gráficas. Se considera así como una fuente lumínica de referencia.
Para establecer una luminosidad homogénea en el estudio, una fórmula sería la de emplear 36W/m2 y la situación de las luminarias debe ser promediada y equidistante.
Dichos tubos deben situarse a un altura de 2,35 m. y los paneles reflectores de las luminarias sean blancos.
Para optimizar los resultados, las paredes y suelo del estudio deben ser de un tono blanco satinado.
Esto es lo que dice la teoría, pero cada uno debe adaptarlas a sus circunstancias.
Si no encontramos ese tubo en concreto, existen varias alternativas que también nos pueden servir para nuestro propósito como son las siguientes:
- PHILIPS ? MASTER TL-D 90 Graphica 36W/950 1SL
- OSRAM ? L 36W/950 COLOR PROOF 25X1
Si se fijan, también llevan ese famoso 950 que explicamos antes.
http://borranchos.wordpress.com/2012/07/23/pintar-con-luz-artificial/