Te hablaba hace unas semanas del reto #empqtdbonito que cada mes lanza Patry en su blog Patrypeando.
En enero proponía hacer algo reciclando cajas de CD y yo me animé e hice un tarjetero (aquí), que por cierto ya se me ha quedado pequeño porque mi colección de obras de arte en miniatura crece de día en día.
De entre todas las propuestas (y había muchas y muy originales), me gustó especialmente la de Alba Baez, del blog Niña Bonita.
Hizo magia y se sacó de la manga un práctico soporte para un calendario de sobremesa y como es más maja y más bonica que las pesetas, no contenta con eso va y regala el calendario que encaja a la medida, listo para imprimir, recortar y lucir:
En cuanto lo ví me quedé enamorada de él por su sencillez y porque podía hacerlo al momento con cosas que tenía por casa, que ya sabes que yo para esto soy muy ansias y muy culo veo culo quiero.
Y encima al poder cerrarlo queda recogido y no ocupa apenas espacio, algo que para la mesa del esposo viene de lujo, que fue de quien me acordé nada más verlo (aquí iría un emoticono de una carita sonriente con dos corazones en los ojos) (#modorománticoon).
Los materiales que necesitarás para hacer uno como este son los siguientes:
- Una caja de CD.
- Papeles de colores (los míos son de Tiger).
- Washi tape.
Para decorar el soporte del calendario sólo habría que hacer una carátula para la portada con dos papeles de colores de la misma medida, pegados entre sí revés contra revés (para que se vean bonitos por dentro y por fuera de la tapa), y cubrir también el interior y la parte posterior de la caja:
La que yo escogí es de esas estrechitas que tienen integrado el soporte para el CD, así que no pude quitarlo para forrar el interior. En otras más anchas sí se puede y así es más fácil ponerle el papel.
En mi caso y para que no se notasen tanto los bordes, puse encima un trozo de cartón de una caja de cereales cortado a la medida y luego le pegué el papel azul (también tengo que decir que esto es manía mía porque en realidad esta parte no se verá porque es lo que va apoyado sobre la mesa, pero son esas cosas que no puedo dejar de hacer y que si no hago no paro hasta que acabo por hacerlas, así que como ya me conozco, las hago de primeras y me ahorro el trabajo después):
Para sujetar los papeles de los meses y que no se escurriesen de la tapa, hice un pequeño bolsillo de papel forrado con washi tape (de hecho tiene la misma anchura que el washi) y lo pegué a ambos extremos de la carátula con celo de doble cara:
Antes de probar el invento creía que los papeles podían doblarse hacia adelante cuando los pusiese en posición vertical, así que forré una pequeña pinza de madera con washi tape para sujetarlos.
Al final no fue necesaria, pero como quedó tan bonita la dejé, por si el esposo quiere sujetar con ella una nota o algo así.
Este es el resultado final:
Desde aquí sólo me queda darle las gracias a Alba de mi parte y del esposo. A #laniña la tengo esperando por el suyo, que quiere con papeles de color rosa por supuesto.
Por una parte me da una pereza tremenda porque ella no lo va a utilizar para nada, pero por otra tengo muchas ganas de ver qué tal queda en ese color y para estrenar algún washi nuevo (¿A alguien más le pasa este quieroperonodebo? Decidme que sí por favor).
Voy a mandarle un whatsapp al esposo para que me mande una foto y ver qué tal queda.
¡Pasa un feliz día!
P.D.: Si te has quedado con ganas de calendarios bonitos, este viernes te traigo un post con muchísimos y todos tan bonicos, tan artísiticos, tan floreados, tan handlettering, tan con acuarelas, tan modernos y tan todo que no sabrás con cuál quedarte y los vas a imprimir todos. Aviso.
Fuente: este post proviene de Pica Pecosa, donde puedes consultar el contenido original.
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