Se acabaron los típicos cuadros de corcho encima del escritorio, que pueden resultar muy útiles pero nada bonitos. Hace un tiempo, os proponía utilizar las mallas metálicas, muy bonitas y versátiles, pero para los más tradicionales aquí tenéis otra opción 100% personalizable.
Para ello podemos utilizar diferentes materiales que tengamos por casa, como un trozo de tablero reciclado, pintura, chinchetas… El principal material que necesitaremos es un tablón de madera (nosotros lo teníamos por casa, pero lo podéis comprar en grandes superficies de bricolaje).
Una vez pintado el tablero, empieza la creatividad. Partiendo de la base que nuestro tablero tiene que ser funcional, decidimos que tuviera un trozo de corcho para poder enganchar nuestras notas con chinchetas y otra parte con pintura pizarra. Estos dos productos, junto con los siguientes son de Creavea, una tienda online donde puedes encontrar cualquier producto para hacer manualidades, así como regalitos para amantes del DIY.
Pero recordad, nuestra filosofía es que nuestros DIY sean fáciles y rápidos, así que el corcho es en formato lámina adhesiva. ¡Todo un descubrimiento!
También decidimos añadirle una cajita portanotas de madera, para guardar los post-it y papeles varios. Además, decidimos decorarla con pintura acrílica nacarada efecto cobre.
Y para acabar de perfeccionarlo, unos toques decorativos con pinzas, un poco de cordel y cola blanca para pegar la cajita de madera. También pusimos un rollo para guardar la tiza.
Y en menos de 1 hora tenemos listo nuestro tablero para el escritorio. Podéis colgarlo en la pared o apoyarlo encima de la mesa.
¿Qué os ha parecido el DIY? Si os animáis, no dudéis en mandarnos una foto!
Fuente: este post proviene de diycreateblog, donde puedes consultar el contenido original.
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