Se necesita simplemente un buen montón de frutas redondas, (ideal si son de temporada, como arándanos, frambuesas, cerezas, o simplemente trozos de sandía o de melón) y palillos de mesa.
Los niños deben realizar construcciones de fruta, como puedes observar en las fotos que te dejo. Lo pasan bien un rato, y se entretienen de una manera sana y divertida. Pero...¡no esperes que tarden en comérselo!!